Tenía mucha rabia. En el fondo de mi corazón sabía que Karla me decía la verdad porque tenía claro cuan turbios eran los dirigentes de toda esa compañía televisiva.
Me perturbaba el abrir los ojos hacia la verdad. Quizás una parte de mí se sentía inútil e indefensa al saberse engañada por el mundo... ¡Que jodido mundo!
Quedé pensativa por mucho tiempo. Karla no me interrumpió, esperó paciente hasta que me armé de valor para exponer cuanto sentía y quisiera decir en ese momento.
-¿Qué pasó luego de que me fui?- fue lo primero que pregunté.
-Las casas televisivas vecinas no dejaron de llamar- comenzó- solicitaban todo sobre ti, desde lo más nimio a lo más desquiciado. Teresa se regocijaba con toda la atención y se veía cada vez mejor... al final terminó apoderándose de una gran cantidad de dinero y huyó de la empresa. Alan, el gerente, se vio perturbado luego de ese robo y no volvió a ser la persona extravagante que antes fue. Ahora viste de traje y con una máscara de seriedad permanente...- tomó una breve pausa y luego continuó- como verás... las cosas no salieron como todos esperaban... bueno, quizás para Teresa sí pero no le será eterno.
Por lo menos la gente no gozaba tanto luego de haber lucrado con mi vida...
-¿Y Oliver?- no hice comentario alguno sobre lo que recién me había dicho... o no en voz alta. Mi mente procesaba mil cosas y no daba más. La pregunta fue solo para darme tiempo de razonar.
No puse atención a la respuesta... solo pensaba y pensaba... De vez en cuando solté unas exclamaciones para hacer parecer que prestaba atención pero pareció notarlo.
-No me oyes- exclamó divertida, moviéndome un poco.
-Claro que si- me defendí de inmediato- o bueno... quizás no.
-No importa- sonrió- ya me siento bien por haberte encontrado.
-A todo esto... ¿para qué me querías?- recién se me ocurría plantear esa pregunta.
-Tenía que aclarar las cosas... éste último tiempo he visto una infinidad de cosas tuyas en la TV y no pude evitar sentirme algo culpable... estaba segura que me odiarías y quería enmendar en parte mi error...
-No hay problema- sonreí para infundirle ánimo- tu no tienes la culpa...
El viaje se me hizo corto a su lado. Hablamos de un montón de cosas sin sentido y otras con mucho. No tuve miedo a abrirle mi corazón pues si había sido capaz de ir hasta (tu país) en mi búsqueda era en verdad sincera... no cabía duda.
Las horas pasaban y pasaban y yo aún no llegaba a Alemania... no era culpa del avión ni tampoco era que Karla me aburriera... a decir verdad el viaje se hacía divertido y corto pero sentía que no llegaría al cumpleaños... al momento indicado.
Apenas bajamos del avión invité a mi amiga a la fiesta. Se negó por compromisos adquiridos con Oliver, quien- según contó cuando no le puse mucha atención- ahora era su novio.
Hice parar al primer taxi que pasó y le di la dirección de mi casa. Ya era de noche y lo más seguro es que la fiesta estuviese en pleno desarrollo.
No quise telefonear a Simone para que nadie sospechara nada así que solo llegué al condominio que tanto amaba y sentí como se me hinchaba el pecho de regocijo. Estaba en casa.
Me deslicé por las sombras más lejanas a la casa de mis vecina y observé desde la distancia como las luces brillaban con alegría dentro de ésta. El corazón me latía a mil por hora.
Entré a casa con gran cautela y consciente de que papá no estaría en ella, también era un invitado. Me cambié de ropa y arreglé un poco y sin esperar más tiempo salí del lugar. Era el momento.
Entré por la puerta trasera con los nervios de punta. Tenía miedo de que alguien indeseado me reconociera y diera alerta de mi llegada antes de tiempo.
-Es hora de la sorpresa- anunció Simone desde lejos, ella me esperaba.
-¿La sorpresa?- escuché nuevamente aquella voz tan familiar y ronca. El corazón se me deshizo en el pecho.
-Si, la sorpresa- una tercera voz desconocida para mí se hizo notar y a los segundos todo quedó a oscuras- yo me encargo.
Tantee el lugar en pos de acercarme más a Tom pero solo chocaba y chocaba con personas... ¿cómo se suponía que debía llegar? ¿La sorpresa era yo, no?
Me desesperó el hecho de estar tan cerca de él y no poder saltar en sus brazos. Mi corazón lo llamaba a cada frenético latido y él desconocía mi presencia.
A los pocos segundos llegué a la escalera y me emocioné por el logro. Estaba más cerca.
-Listo- aquella voz desconocida se hizo notar nuevamente. Encendió las luces y todo tomó brillo nuevamente, cegándome.
El resto de los sucesos me pareció que acontecían en cámara lenta.
Luego de recobrar la vista, con extremada lentitud, busqué ansiosamente a alguien que me llevase con Tom pero, al contrario de lo que esperaba, nadie se giraba a mirarme. Todos estaban atentos a un pastel bastante alto que se encontraba sobre una mesa con ruedas.
¿Esa era la sorpresa? No, aún faltaba lo más importante.
Con el sonido de un par de globos reventándose, apareció por la superficie del pastel alguien que yo no imaginaba ni en el más feo de mis sueños.
Altiva y arrogante se levantó Chantelle ante los ojos sorprendidos de la mayor parte de los invitados y se deshizo pronto de su traje de pastel. Sin esperar apenas unos segundos todo estaba concretado.
Tom miró hacia todos lados, confuso, y casi me pareció que se encontró con mi mirada desesperada pero antes de que pudiese reaccionar él o yo, su rostro fue arrebatado con algo de brusquedad por las manos de aquella mujer. Se estaban besando.
Una exclamación de sorpresa recorrió la sala, seguida de arrebatos infantiles de algunos invitados, gritando estupideces y ya después de eso no supe más. Mi raciocinio se desconectó.
¿Quién era yo y quién era ese al que besaban? No sé si el acto duró mucho o poco pues di la media vuelta, inconscientemente, y comencé a retroceder por la sala.
Choqué con un par de personas pero todos me ignoraban, fijando su mirada en la escena. Yo tampoco les tomé mayor importancia, había perdido algo.
Ya había dejado atrás una gran parte de mi alma y corazón.
<<Los ocasos son infinitos... que infinita maldición de tener que ver cada día como mi alma se hunde en cada uno de esos ocasos, reviviendo el dolor de la primera vez. Que ironía la de nuestro amor... que ironía la de vivir... vivir por sufrir...>>
No quería creer aquello que había visto. Había superado el hecho de ver aquella escena por fotografías pero ahora estaba ahí, frente a mi, y no había nada que hacer. No era invención de los medios, no era un ataque de celos sin fundamentos, no era nada y a la vez lo era todo... era algo que acababa de ver con los mismos ojos que lo observaba a él con tanto amor solo hace unas semanas atrás.
Me dejé caer apoyada en el primer árbol que encontré y solté todo aquello que sentía. No cayó lágrima alguna, todo lo contrario, sentí que mis lagrimales se secaban y todo dentro de mi también.
Me sentía sin vida, perdida en aquél país ahora extranjero. No tenía motivo alguno para estar ahí, al otro lado del mundo, aparte de el ver a mi padre porque nada más me unía.
Miré la noche, miré la luna y las miles de estrellas que tintineaban sobre mi cabeza. ¡Cuantos amores y desamores habrían presenciado! Y en esos miles y miles de puntos brillantes me perdí... dejé de pensar y divagué por donde a mi mente se le dio la gana...
Era lindo recordar los buenos momentos... ¿por qué darle tanta importancia a un beso? Quizás porque no se negó...
Odiaba pensar que sus labios habían estado con otros... pero antes de mí habían tantas que en verdad este beso no era TAN importante... pero el hecho de que yo lo viese, de que fuese en mi presencia, aunque el no supiese, y que él no hubiese hecho nada para pararlo... eso me molestaba.
Reviví cada beso dado y envidié que ahora los labios de esa chica probasen aquello que por tanto tiempo me perteneció.
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Narrador omnisciente.
Él la vio entre la multitud e instantáneamente la siguió. Estaba descompuesta y verla así a no le agradaba en los más mínimo. Te protegeré, había prometido muchas veces y ahora era consciente de cuanto necesitaba cariño esa chica, lo necesitaba.
Salió a su encuentro cargado de un cierto cargo de consciencia aunque nada de lo que pasó era su culpa. Se repitió mil veces que no había hecho nada y no lo podría haber evitado porque no sabía lo que pasaría pero... de todos modos le dolía que ella sufriera.
La gente no abría el paso cuando él pasaba y tuvo que forcejear en un par de ocasiones para atravesar la habitación. El aire cargado de respiraciones y tabaco lo mareaba y acabó con dolor de cabeza al salir del lugar.
No tardó más que un par de segundos en ubicarla. Estaba a tan solo unos metros, agazapada contra el suelo, apoyada en un árbol y con la mirada perdida en el cielo.
Ella no sintió su presencia, estaba inmersa en un mundo de cavilaciones y recuerdos... demasiados recuerdos que añoraba revivir. Solo deseaba ver una cosa en esos momentos. Un par de ojos almendrados.
Como si algún ser divino se apiadara de su sufrimiento, ante sus ojos, se cruzaron otros del color tan anhelado. Tan iguales que le llegaba a doler.
-¿Estás bien?- preguntó él con su firme voz.
La chica no respondió y se quedó mirándolo por instantes infinitos. Una gran parte de su corazón anheló el amor no entregado, se perdió en sus ojos y dejó de pensar. Para detener lo inevitable se puso de pie y comenzó a caminar entre los árboles de un pequeño bosque que atravesaba el condominio.
Sus pasos dejaban un suave crujido de hojas secas. Estaba consiente de que no iba sola porque a sus espaldas se oía otro par de pisadas como un eco de las suyas.
-Ya no me sigas- gimió luego de dar varios pasos y cansarse más por el peso de su alma adolorida que el de su cuerpo.
-No te dejaré sola- repuso firme él, dejando en claro que ante ninguna circunstancia ni objeción se iría. Ella lo comprendió y no insistió más.
No quiso darle la cara y la chica se mantuvo de espaldas para no afrontar aquella realidad. Si giraba se encontraría con aquellos ojos almendrados y esa boca tan delicadamente construida... no podría aguantar porque las fuerzas le fallaban y también la mente. Se sentía medio en la realidad, medio en una fantasía.
Él no soportó más la situación y se acercó lentamente hasta ella. Los músculos se le congelaron en el acto y sintió que desfallecería si él se acercaba unos metros más. No lo soportaría.
Casi con algo de brusquedad, la tomó por un brazo y le dio la media vuelta hasta que quedó frente a sus ojos. Si no la miraba directamente no podría descifrar que huracán de emociones se desarrollaba en su rostro... ese rostro que todo lo demostraba.
La chica no aguantó más de dolor y lo miró atentamente a los ojos. Quizás era masoquista de su parte todo aquello pero lo necesitaba. Necesitaba ver algo de cariño en aquellos y sentirse nuevamente amada.
Quizás fue parte de una ilusión pero todo le pareció real. El amor que semanas atrás veía en aquellos ojos almendrados ahora le pareció revivido pero parte de ella sabía que no era así... era una parte muy nimia que no atenuó su ilusión.
Él descifró lo que la chica que estaba frente a sus ojos tenía en mente pero no se negó. Haría siempre lo mejor para ella y si besarse era lo mejor y lo que ella necesitaba en esos momentos... no opondría resistencia.
Los ojos de ambos se encontraron y ella se sumergió en una utopía... utopía en donde ellos se amaban... utopía en donde él la miraba atentamente y todo volvía a ser como fue antes del viaje.
Sus labios se encontraron nuevamente, luego de tanto tiempo, y tomaron un ritmo acompasado, acompañado de la soledad y el silencio del bosque- y de sus almas- perdidos en ese mundo irreal.
-Si no quieres puedes detenerme...- soltó ella con la respiración agitada- no te obligues Bill...
-No te preocupes- dijo éste robando un fugaz beso de sus labios- I'll get down on you...
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¡OH DIABLOS! ¿Cómo pude escribir eso? xD dsajdodas
Lo peor de todo es que me gustó >:| Hasta siento que en verdad fui infiel :$
Oh shit, oh shit... >-< Aiii me gustó esto... creo que si alguna vez escribo una novela larga de veritas... habrán infidelidades jaja
Espero les guste chicas ! Lo hice con mucho amor ... por si no lo notaron xD
Las Adoro de aquí a Marte !
Que tengan buen fin de semana c:
Gracias por toooooooooooooooooooooooooooooodo :D
QUEEEEEEEEEEEE.....??
ResponderEliminarXQQ HACES ESTOOOOOOO
XQ NADIE SE DI CUENTA DE MI PRESENCIA....??
Y MAS ENCIMA LO DEJAS AHY¬¬
TE EXIJO QUE SUBAS YAP....!! :P
SUBEEEEEEEEEEEEEEEE QUE MUEROOOOOOOOO
IDIOTAAAAAAAAAAAAAAAAAAA D: COMO SE TE OCURRE DEJARLA AHÍ wkajlskjfvhndlr xd es que ashhhh supuse que era Bill, no podía besar a Tom tan fácilmente k9 jajajaja xd idiota... sigue sigue crea para mí xd te adoro <3
ResponderEliminarWow! Acabo de terminar de leer el fic, bueno el ultimo hasta hoy claro... Eres una escritora increíble, me encanta tu forma de narrar (casi profesional por así decirlo) con tu toque muy personal, pocas escritoras de blogger son así de buenas!.
ResponderEliminarY es difícil encontrarlas jajaja (bno todo esto según lo que YO pienso y lo que a MI me gusta, por que hay personas con gustos y pensamientos diferentes y cada quien no?... Yo te digo lo que yo pienso y es que me gusta como escribes (: y pues siguela pronto por que esta linda, me gusta.)
*O* Gracias Kat... que lindo comentario!
ResponderEliminarEn serio, valoro mucho estos comentarios porque son como... nuevos, no se c:
Gracias por leer mi fic... :]
Y QUE ALEGRÍA QUE TE GUSTE! !
Espero seguir pronto C:
oohhh!!!...dios es uno de los mjores capitulos q he leido hasta el dia de hoy!!!...el mejor!!!..jjjaja..si q me hizo gritar!!!..q gran cap!!..SUBE PRONTO!!!..me encantooooooo!!!!!!!!
ResponderEliminar¡Dios mio!, hace mucho tiempo que no leia tu fic, ya me puse al día jaja. Esta buenísima *O*. Oh diablos x3 amé este capítulo x3. Sube pronto *-*
ResponderEliminarWOW.
ResponderEliminarESTEFIN WN, LO AMEEEEEEEE <3
Te fuiste del colegio y lo empezé a leer xd
Y Mori wn ._.
Bill *-*
Tom .l. Eres un maraco .l.
añsldfñsalñfdsla.<3
Te Adorín Estefín <3