viernes, 9 de septiembre de 2011
Capítulo 16: "Se avecina..."
Dudé por un par de segundos la decisión de contestar... luego me de cuenta que si no lo hacía sería mucho peor. Jugué nerviosamente con el aparatito en mis manos mientras me alejaba "disimuladamente" del lugar.
-Hola- hablé al fin.
-Pensé que no contestarías- su voz... su hermosa y grave voz llegaba nuevamente a mis oídos.
-Te has equivocado.
-¿Cómo estás linda?
-Bien, aburrida... extrañánd...- me puse roja por lo que casi dije- bien- repetí.
-¿Me extrañas?- se estaba riendo, lo podía notar.
-Yo... solo un poco...
-Pues yo te extraño un montón- dijo bajito- pero no le digas a nadie.
Sonreí sola, ¿qué más iba a hacer?
-Que lindo- exclamé- ¿cómo va esa gira?
Se burló de mi un buen rato pues apenas había pasado un día y yo ya preguntaba por la gira, obviamente no habían empezado, pero quería hablar de algo, odiaba el silencio.
Oliver y Karla se reían a carcajadas a unos metros de distancia.
-¿Dónde estás?- preguntó un tanto extrañado- no estás sola, ¿eh?
-Si estoy sola- mentí- veo televisión en la habitación de Stefano.
-¿Me das con él?
-No- respondí rápidamente- está... está durmiendo...- Tom suspiró, amaba a mi hermanito.
-Oye pequeña... ¿por casualidad no has entrado a internet?- preguntó algo dudoso.
-No, aún no... ¿por qué?
-Quizás veas un par de fotos de ayer que...- ¡Me habían encontrado!
-¡NO!- solté un grito ahogado que no tomó mayor volumen.
-No te preocupes- se excusó de inmediato- ni te ves, bueno, para mi sí pero para el mundo, no.- Suspiré, no podía esperar más.
Seguimos hablando por unos minutos. En reiteradas ocasiones tuve la intención de contarle sobre esto que me pasaba pero me arrepentía... como la cobarde que siempre había sido. Al final solo nos despedimos y ahí quedé, con la impresión, nuevamente, de haber tomado la decisión incorrecta.
-¿Ya estás lista? tus padres te esperan- los chicos se acercaban a mi aún con los restos de una buena risa.
-Claro- respondí de inmediato guardando mi teléfono.
-Mañana te esperamos nuevamente- Karla tomó la palabra- aún falta mucho por aprender y seguramente pronto comenzarán a grabar los comerciales para promocionar el programa, comienza pronto.
-¿Co...mer...ciales?- titubee.
-Ya no la asustes- Oliver me comenzó a empujar hacia el ascensor pues me había quedado clavada en el piso- aún no sabemos nada, solo vuelve mañana con mucha energía.
Mis padres estaban esperándome, tal como habían anunciado antes, en el primer piso de aquél gran edificio. se veían sonrientes.
Me interrogaron sobre lo que había aprendido, que tal me parecía todo, si estaba conforme... incluso papá se veía emocionado.
-Creo que es bueno darle una oportunidad a la televisión en esta familia- soltó orgulloso- lo harás bien.
-Gracias papá- dije al borde de las lágrimas, ese era un gran reconocimiento para mi.
Mi hermanito corría por todos lados mientras mis padres y yo acabábamos con los últimos papeleos, firmas, permisos... etc... cosas legales que no me importaban demasiado.
-Tendrás buen dinero- susurró mamá.
Volvimos a casa, bastante tarde, y solo caí rendida en la cama. Mi mente trabajaba a miles de kilómetros por hora pero mi cuerpo solo deseaba estar ahí recostado, no gastar más energía para poder pensar un poco mejor.
¿Cuánto cambiaría esto mi vida? Me imaginé, solo imaginé, que Tom me pedía ser su novia... ¿afectaría esto mi trabajo? ¿el suyo?
-Scheisse- susurré contra la nada- pensar nunca ha sido lo mejor.
Solo me quedaba vivir el momento, disfrutar mi momento de fama, si es que lo alcanzaba a tener, y seguir siendo yo, no más.
La mañana estaba un poco más húmeda que de costumbre. Cuando desperté, el sol recién estaba tomando lugar en este hemisferio y el sonido de la ciudad ya llegaba por mi ventana, era un nuevo día.
Mi cuerpo pedía a gritos que siguiera recostada en aquella confortante cama pero sabía que no podía ser así. Más actividades, más responsabilidades.
-¿Lista para el instituto?- papá estaba amarrando los zapatos de Stefano.
Asentí con un gesto de cabeza mientras daba el primer mordisco a mi manzana. Casi, solo casi, olvido mi bolso... mi mente no estaba funcionando bien.
Las chicas estaban esperándome ansiosas en la entrada, podía ver a metros como se morían por inundarme con preguntas. Bajé lentamente, intentando re-ordenar todo el día anterior para poder contarlo pero no alcancé a caminar un par de metros y ellas ya venían hacia mi.
-Cuéntanos todo- ordenó Pía cargando la voz en la última palabra.
Les conté lo que pedían... todo, sin guardarme ni un detalle. Ellas dijeron que lo mejor sería decirle a Tom pronto y yo sabía que tenían la razón pero no quise escucharlas, tenía miedo a una posible reacción.
-Ese no es Logan- susurró Carmen señalando a una pareja que venía de la mano.
-Y Gaby- agregó Pía.
Levanté la vista hacia donde las chicas señalaban sin disimular y vi como mis amigos se sorprendían al vernos ahí, imaginé que escaparían de un momento a otro.
-Hola- Carmen saludó con un gesto de la mano para llamar su atención- acérquense chicos...
Los susodichos se miraron nerviosos y comenzaron a caminar lentamente hacia nosotras, Gaby se aferró con fuerza al brazo de su compañero.
-¿Qué haces por aquí Gaby?- pregunté con un tono algo jocoso, la chica estaba sonrojándose completamente.
-Acompañaba a Logan- dijo bajito.
-¿Novios?- soltó Pía de un momento a otro.
-No- respondieron al unísono, luego Gaby retomó la palabra, mi amigo no decía nada- solo somos amigos, lo vine a dejar.
-Que amigos más cercanos- nos seguimos burlando de ellos hasta que admitieron que eran novios, una noticia que me alegraba. Los chicos se veían felices, eso era bueno, y me alegraba aún más saber que todo se había consolidado en la fiesta que dimos en casa, por primera vez me sentí útil.
El día en el instituto no tuvo nada interesante, el último tiempo había subido un poco mis calificaciones en varios ramos, en otros las bajaba, pero por lo menos me mantenía al nivel de Alemania.
Papá estaba esperándome a la salida. Subí al auto luego de despedirme rápidamente de mis amigas y me llevó en el acto a casa, al parecer tenía mucho que hacer.
-Llamaron hace un rato- me explicaba- y dijeron que tenían cosas que arreglar y aclarar... tienes este fin de semana libre pero la próxima semana repleta de cosas, la semana siguiente es el estreno.
Los nervios estaban a la par con la adrenalina que me invadía en ese momento. Por una parte iba a empezar un gran proyecto... por otra, el chico que me gustaba no sabía.
Me cambié de ropa en casa y salí a tomar locomoción para ir al canal. Me sentía observada por el mundo... mi mente fantaseaba con miles de cosas que hasta me daba vergüenza pensar. Fama, fans, premios... y todo por conducir un programa, sí, fantasías.
-Busco a...- estaba en el mesón de "Informaciones" del lugar- no lo sé, Oliver, Teresa... Karla...
-Hola- sentí una familiar voz cerca mío- ¿estás lista para esta jornada?
Oliver me esperaba sonriente a un lado del mesón, vestía tan informalmente como el día anterior. Me indicó las actividades del día y comenzamos a practicar todo.
Así se me fueron días, una semana y algo, en realidad. La propaganda del programa ya salía en TV pero aún no me mostraban a mi, al parecer sería una sorpresa.
Karla me había enseñado diversas técnicas para estar bien frente a la cámara. Oliver aún practicaba con mi entonación y todo eso. El gerente me había mandado a llamar un par de veces, al parecer tenía bastante interés en mi y el programa... su mirada me parecía sospechosa, la de Teresa igual pero había decidido no tomar en cuenta aquél extraño sentimiento.
Tom me había llamado casi a diario, al parecer ya estaban terminando todo... el lunes llegaría a Hamburgo de nuevo y nos juntaríamos, al fin.
Me encontraba en una sala de aquél enorme edificio esperando a que Teresa saliera de una pequeña conversación con el gerente... cosas de altos cargos, supuse.
-Tengo una excelente noticia- anunció aquella sonriente mujer saliendo de la oficina- el lunes debutarás en televisión.
La miré con los ojos casi desorbitados. Habían 7 días a la semana... 30 días al mes... y tenían que elegir justo ese lunes. Malditas coincidencias, maldita suerte.
-¿Pasa algo?
Y además preguntaba si pasaba algo... En ese momento quise explotar contra el mundo. Me imaginé corriendo por todo el lugar, insultando a medio mundo, gritando todo lo que quería gritar en aquél momento... y luego, luego de soltar todo eso, suspiré resignada.
-Nada- casi gemí.
Me prepararon como nunca ese fin de semana. Al parecer, el primer programa sería con unos invitados especiales, que ni yo sabía quienes eran, y la idea es que todo fuese lo más natural posible.
La pauta de preguntas que me entregaron eran super objetivas y no me daban demasiada información de los personajes, a decir verdad, no me decían nada.
La maquilladora le estaba dando los últimos toques a mi rostro, me sentía extraña... quizás distinta o algo cansada, pero estaba agotada y con el corazón en un ritmo desacelerado.
El espejo me devolvía una imagen que no esperaba de mi, parecía una persona de televisión en serio y eso no me llenaba. Podía ver más allá de lo que el reflejo mostraba, podía ver mis ojos cansados y apenados, podía ver mi alma con un pequeño sufrimiento, podía ver la confusión de mi mente y eso no me gustaba.
-20 minutos- anunció alguien a lo lejos. 20 minutos y mi vida cambiaría, eso era un hecho.
Las fotos que había colgado internet de cuando los chicos se habían ido, donde yo aparecía, aún sonaban fuerte entre los clubs de fans de TH pero nadie me había descubierto, por suerte. Pensar que hace un par de semanas ni imaginaba que iba a llegar este momento.
Me quedé frente al espejo por unos minutos más. La maquilladora seguía retocando cosas como si no le importase que yo me sintiera ausente. Mi mente procesaba todo lo que estaba a punto de suceder... un gran momento. Las voces de mis amigas hace un par de días inundaron mis pensamientos...
-Tu puedes (tu nombre)- me animaba Carmen a cada instante.
-Serás nuestra super estrella- comentaba Pía entre risas- luego me haces contactos para entrar al mundo de las pasarelas.
Aquellas eran las voces que me inspiraban, que me hacían seguir adelante en esto.
-10 minutos- otra voz un tanto lejana resonó en mi mente.
¿Qué estaría haciendo Tom en ese momento? Según lo que sabía, ya habrían llegado a Hamburgo hace un par de horas. Cuando le dije que no podía ir se desilusionó un poco pero me excusé diciendo que tenía deberes que hacer... cosas así... quizás descubría todo esto por la TV pero así sería más fácil, para mi.
-5 minutos...
-------------------------------------------------------------------------------------------------
¿Tardé un siglo no? :C Es que.. no me salía y el cap... y ahora salió muy largo D: Espero no haberlas aburrido demasiado :S Pero... aw... ya seguiré pronto ... ya verán jajaja xD
Me siento super inútil porque tengo sueño... :C Ayer casi ni dormí... pero bueno, así es la vida jaajaj
Espero que tengan un lindo lindo lindo día mis queridas lectoras <3
Las Adoro con toooodo el corazón <3
Gracias por sus comentarios, felicitaciones, todo :3 Eso me hace sentir tan bien <3 Nuevamente... las adoro <3
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
En todos estos días no había podido leer, ahora estoy al día e.é. Está interesante, ya quiero saber que pasara a futuro *-*. Espero que subas pronto, como ya lo he dicho... me gusta muchísimo tu fic ♥
ResponderEliminarsiiii te demorasteee!!
ResponderEliminarpero valio la penaaaaa genial el capitulo :)
no dios que no sean los invitados que estoy pensandoooo...!! siiiii que sean ellos....!!
yaaa kiero leer.... el otro capitulo
subeee rapidoooo....!! :)
Waaaaaajaja me encanto QUE NERVIOS YA SE QUIENES SERAN LOS INVITADOS 1313 wajajaja osea creo e__e mejor leer el otro *W* <3
ResponderEliminar